La cita fue, como en alguna otra ocasión anterior, en el recinto de Cal Gallifa de Sant Joan de Vilatorrada, localidad donde el Clàssic tiene su sede social. Este encuentro es particular en tanto que está abierto a cualquier participante, si bien es totalmente gratuito para los socios y las socias del club y su acompañante. No es poca cosa, ya que la matinal incluye desayuno a la brasa, en este caso una butifarrada, y la participación en una ruta por la zona.
Desde días antes, se colgó el cartel de lleno por lo que acudieron a la cita los 120 vehículos clásicos permitidos. Al ser un encuentro general, al margen de una sección concreta, los participantes acudieron con modelos muy diversos de todas las marcas y de diferentes épocas. Desde los youngtimers que tenemos más frescos en la memoria porque 25 años no son nada, hasta algún modelo antiguo prácticamente centenario pasando por deportivos de los 80 y utilitarios de los 60 y 70.
Fue una gran satisfacción que tras los años de pandemia, con suspensiones y encuentros estáticos con distancia personal, esta vez se pudiera volver a la normalidad del desayuno de hermandad y la ruta por las carreteras del Bages para disfrutar de una mañana de domingo muy fría pero soleada, al fin y al cabo.
Agradecer a todos los colaborades su apoyo para celebrar esta Trobada Social, así como al ayuntamiento de Sant Joan de Vilatorrada por su implicación y cuyo alcalde estuvo presente en los discursos con los que se dio oficialidad al inicio del curso de actividades del Club para el 2023. En adelante, esperan 12 meses con alrededor de 50 eventos con los vehículos clásicos como foco y sus aficionados como invitados para el disfrute de esta pasión compartida.
Clàssic Motor Club del Bages.